Cuando cruzarse de brazos es todo lo contrario
Fuente: Protestante Digital 20/08/2012 0 comentarios
20 de agosto, 2012 La foto en blanco y negro de un hombre solo, con los brazos cruzados, en medio de una multitud de congéneres, brazo en alto, haciendo el saludo nazi, ha vuelto a resucitó en internet. Recuerda la triste historia de August Landmesser, que en 1936, en pleno apogeo del nazismo, decidió ir contracorriente. Durante la botadura de un buque de la marina alemana, la multitud se congregó en Hamburgo. Mientras todos saludaban como el Führer, un hombre permaneció impasible, con los brazos cruzados.
La imagen, inquietante, fue rescatada en un blog cuyo tema nada tiene que ver con la imagen: era para facilitar las tareas de socorro tras el terremoto y posterior tsunami que sacudió Japón (Senrimonchi, se llama el sitio).
Y desde esa página, Landmesser fue a parar a Facebook, y desde allí, a medio mundo.
CASADO CON UNA MUJER JUDÍA
Fue en 1991 cuando una de sus hijas identificó a este hombre como August Landmesser, un trabajador del astillero de Hamburgo. Su padre, que perteneció al Partido Nazi desde 1931 hasta 1935, fue expulsado por haberse casado con una mujer judía, Irma Eckler.
El matrimonio tuvo dos hijas, motivo por el cual fue acusado de "deshonrar a la raza", y acabó dando con sus huesos en la cárcel. Su mujer también fue detenida por la Gestapo.
Las niñas (Ingrid e Irene), fueron separadas. La primera fue a vivir con su abuela materna mientras que la otra fue llevada a un orfanato y, más tarde, adoptada por una familia.
Cuando Landmesser, el hombre que no quiso dar su brazo a torcer, salió de prisión en 1941 fue enviado a la guerra. Según publica The Washington Post, desapareció en combate y se le dio por muerto.
En 1996, su hija Irene, escribió la triste historia de su familia. La posteridad, por una carambola de la red, hizo que Landmesser volviese a ser noticia, esta vez para asombro del mundo enterp mostrando a un hombre que por dignidad se manifestó en contra de la corriente. Por una vez cruzarse de brazos significaba todo lo contrario a lo que habitualmente simboliza.
Protestante Digital
0 comentarios hasta ahora
Escribe un comentario