A casi un año de educar en casa a nuestros hijos
por Universo Cristiano 15/06/2010 2 comentarios
Por Zabdiel Torres. Hace poco menos de un año, mientras mi esposa y yo contemplábamos la posibilidad de sacar a nuestros hijos de la escuela para educarlos en casa, nuestro pensamiento era: "podemos probar el homeschooling durante un año, nuestros hijos son muy pequeños y pueden regresar a la escuela sin problemas si esto no funciona". Hoy pensamos que sería una locura regresarlos al sistema escolarizado. No solo nuestros hijos están desarrollando un gran amor por aprender, sino que sus corazones están cada vez más ligados hacia nosotros y nuestros corazones se han vuelto hacia ellos también (Mal. 4:6).
Al principio fue muy difícil, y más de una vez pensamos que terminaríamos llevándolos a la escuela de nuevo. Buscábamos materiales en Internet que pudiéramos usar, imprimimos muchas hojas, pusimos un pizarrón en "el cuarto de juguetes", y cada día nos sentíamos más perdidos. Los niños se aburrían y terminaban rehusándose a trabajar. Nos cruzaba por la mente la horrible idea de que seguramente les estabamos haciendo un daño irreparable.
Adicionalmente, varias veces la nostalgia de nuestro propio paso por la escuela se contraponía a la dirección que Dios ya nos había dado. Una vez, mi hijo mayor me preguntó: "¿Papá, por qué ya no nos llevas a la escuela?" Mi corazón se entristeció como si me preguntara: "¿Por qué no nos das de comer?". Le contesté: "los niños van a la escuela para ser educados porque sus mamás no pueden educarlos en sus casas, algunas están muy ocupadas. Pero hay que darle gracias a Dios de que mamá puede enseñarles". Mi hijo me regaló una sonrisa y jamás volvió a preguntarme sobre el tema.
La familia no ha presentado mucha oposición. Los pocos que han expresado abiertamente su descuerdo respetan nuestra decisión. Nunca han tenido un espíritu de escrutinio sobre nuestros hijos y eso ha aligerado mucho la carga. Ahora que están viendo algunos resultados favorables, la resistencia es casi imperceptible.
Dios nos ha bendecido tanto en estos meses. Por recomendación de un amigo, compramos un currículum que mi esposa aplica extraordinariamente. Es admirable la forma en la que ella ha abrazado este proyecto. Su esmero, determinación, responsabilidad, creatividad y lealtad han permitido que nuestros hijos gocen de la bendición de ser educados en el hogar bajo principios bíblicos.
El apoyo y solidaridad que sentimos de la comunidad de familias de Homeschooling México (www.homeschoolingmexico.com.mx) ha sido también una grande bendición. Ver a los hijos de las familias que ya van de salida en esta tarea es de gran aliento y nos da una gran esperanza para el futuro. Me impactó saber que Esteban Íñigo, un excelente joven educado en el hogar, ¡sus padres lo sacaron de la escuela a los 13 años! Nunca es tarde para comenzar y obtener resultados extraordinarios. Dios es poderoso.
Nuestro hijo mayor aprendió en tres meses lo que en la escuela le hubiera llevado todo un año y ha aprendido varias canciones "en inglés" (lo pongo entre comillas porque no estoy plenamente seguro si entiende todo lo que dice). En la escuela, tan solo una de esas canciones, habría sido el "gran logro" del festival de fin de año. Lo mejor de todo es que son canciones que reconocen la grandeza de nuestro Dios.
El pequeño Eleazar, de apenas 3 años y medio, ama las letras, las atesora y se goza cada vez que aprende una nueva y la repasa por su cuenta todo el día. Se sabe 14 letras del abecedario con su fonética en inglés, cuenta hasta el 49, y le encantan los laberintos. Hace dos semanas deletreó la palabra "tomate" y leyó la palabra "mazapán". Si hubiera continuado en el kinder, seguiría poniendo su cara de disgusto al llegar a la puerta de la escuela, estaría viendo las vocales y a duras penas contaría hasta el 10.
Dios es bueno.
2 comentarios hasta ahora
Escribe un comentarioMe consuela saber que no he sido la única en haber tenido las mismas preocupaciones en cuanto al inicio de educar en casa a mis dos hijas, sobre todo porque en mi pais no hay apoyo sobre este tema. Bueno gracias a DIOS me ha puesto esta bella red en mi camino, muchas gracias por todo lo que he recibido de ustedes. Claudia Osorio.
La educación secular como de doctrina está bien, también seguridad por estar en casa, comen lo que en casa se permite, etc. Por otro lado recuerdo levantarme con cierto tiempo de anticipación para arreglarme y soportar el clima, recorrer cierta distancia, etc era también una oportunidad para ir platicando con mi gran amigo; hoy como adulto entiendo que aprendí detalles tan importántes fuera de casa, que luego me fueron útilies en mi juventud y adultéz como para ir a la iglesia y al trabajo. Atte