
I.
Y por mi sufriste en silencio mi dolor
Por mi rebelión, azotado y herido
Y por darme paz, recibiste mi castigo
Coro.
Por tu llaga sano soy, soy fruto de tu aflicción
Oh Mesías, Salvador, hoy te rindo adoración
Pusiste tu vida, expiación por la mía
Jesucristo mi Rey, glorioso Mesías
II. Varón de dolores, fuiste desechado
En todo quebrando experimentado
Como un cordero al matadero llevado
Y con tu sangre, limpiaste mi pecado
Si desea conocer más sobre la música cristiana y cómo identificar himnos cristianos de acuerdo a las Escrituras, puede consultar los siguientes artículos. La proliferación de la música cristiana contemporánea --que no siempre está de acuerdo con la edificación del carácter de Cristo en el creyente y que incluso apunta en dirección contraria-- ha permeado en la mayoría de las iglesias cristianas, por lo que es necesario analizar, evaluar y discernir la música que se usa en nuestras iglesias.
Artículos relacionados
- 1. El orden divino en la alabanza: las Fuentes (introducción)
- 2. El orden divino en la alabanza: el Incienso (1a parte)
- 3. El orden divino en la alabanza: el Fuego (2a parte)
- 4. El orden divino en la alabanza: la música espiritual (3a parte)
- 5. El orden divino en la alabanza: el Sacerdote (4a parte)
- 6. Probando la alabanza que agrada al Señor (5a y última parte)
0 comentarios hasta ahora
Escribe un comentario